Hemos estado ofreciendo distintas perspectivas a nuestros lectores buscando inspirarlos hacia su participación ante la crítica situación socio-política de Venezuela. En esta nueva entrega movemos el péndulo desde lo colectivo hacia el trabajo personal. Existen numerosas evidencias investigativas que señalan cómo un trabajo colectivo es más efectivo al conformarse con participantes con valores e intenciones similares a las sostenidas por el pensamiento inspirador de ese colectivo o grupo.
Tendemos a relacionar el término poder con el gobierno de un país o fuerzas de un Estado, en especial los militares. Sin embargo, la segunda acepción según la Real Academia Española proveniente del latín potere, se refiere a la facultad o potencia de hacer una cosa. También tener la facilidad, tiempo o lugar de hacer una cosa.
En estos tiempos cuando los venezolanos que deseamos una Venezuela libre, luchamos en clara desventaja contra un estado criminal paralelo, creo que puede ser útil retomar y apropiarnos de esta segunda acepción de poder. Es decir, activarnos en pro de acrecentar nuestro poder personal para apoyar más efectivamente la construcción del poder legítimo al cual aspiramos.
El poder cambiar es lo que nos da poder
Si deseas cambiar algo en ti o cambiar situaciones externas, es muy posible que necesites adquirir nuevas capacidades para crear una nueva situación. La mejor manera de empezar es activar tu propia habilidad para cambiar:
- a) Deslastrarse de lo que ya no te sirve.
- b) Añadir nuevas capacidades a tu repertorio.
¿Cómo cultivar la habilidad para cambiar?
Para realizar (pensar, sentir, actuar) en forma diferente a lo acostumbrado, requieres crear nuevos patrones de conexiones neuronales en tu cerebro. La forma básica para aprender a hacer algo es fortalecer nuevas rutas de conexiones. A medida que estas nuevas rutas de conexión neuronal se hagan más fuertes, se van debilitando las rutas menos utilizadas.
Podemos realizar estos cambios neuronales a través de la repetición de conductas: a) haciendo rutinas alternas para evitar la conducta que se desea eliminar o b) incorporando la conducta nueva hasta que se convierta en parte de tus rutinas habituales. Es decir: practicar, practicar, practicar…como bien lo saben deportistas, músicos o personas que desean aprender un nuevo lenguaje, entre otros.
Hasta allí, todo bien. Sin embargo, no todos los cambios son posible realizarlos con esta sencilla receta. Otros factores intervienen para boicotear cualquier proceso de cambio. Naturalmente, al enfrentarnos a la disyuntiva de actuar de una u otra forma, el patrón neuronal que ha sido fortalecido por la costumbre se activará más rápidamente que el nuevo patrón que estamos empezando a formar. Por tanto es necesario incorporar una pausa de consciencia activa en la disyuntiva, para escoger el camino menos frecuente y por tanto más difícil de realizar.
Para sostener cambios en el largo plazo y poder contrarrestar la tendencia de la costumbre, los cambios se deben abordar siguiendo un proceso integrador. Este permite alinear: emociones (relacionadas con nuestras motivaciones internas), conocimientos (el porqué objetivamente nos conviene ese cambio) y acciones (actividades concretas hacia el logro del cambio que deseamos hacer).
Por ejemplo, para adoptar una rutina más saludable de comida, no basta proponerse a comer sano durante un tiempo determinado. Si nuestra motivación parte de circunstancias externas como bajar de talla para usar un determinado vestido o para lucir mejor en nuestras vacaciones de playa y creemos que bajar de peso siguiendo una dieta sana nos va a solucionar el problema, buscaremos hacer una dieta estricta. A largo plazo, como muchos de nosotros hemos experimentado, se volverá a ganar el peso perdido.
¿Qué sucedió? Es verdad que se mantuvo una práctica constante durante un tiempo, pero no se tuvo el aliciente de una fuerte motivación interna acompañado del conocimiento adecuado. Se tendría un resultado distinto de haberse tenido la intención de mejorar la salud en general, bajando de peso como consecuencia. Tampoco se estaba consciente de que para mantener un menor peso a largo plazo, es necesario cambiar de estilo de vida. Las dietas estrictas – como tiempos de excepción dentro de un estilo de vida no saludable – permiten bajar de peso, pero luego este se gana de nuevo al volver a la rutina acostumbrada. Se repite el ciclo con otra dieta, similar o distinta, activándose ahora el llamado efecto yo-yo ante el cual el cuerpo responde aumentando fisiológicamente la dificultad para lograr mantener el peso deseado.
¿Cómo saber qué es lo prioritario a cambiar?
Idealmente lo sabríamos si estuviéramos más en contacto con nosotros mismos y nuestras necesidades internas. Con frecuencia se produce un llamado al cambio cuando circunstancias externas nos obligan a enfrentarnos a situaciones que nos retan salir de nuestra zona de confort. Nos damos cuenta que no son suficientes las capacidades que nos habían apoyado en el pasado. Esto sucede en casos enfrentar una mudanza de país, un divorcio o viudez, el retiro o un ascenso en el trabajo.
Sin embargo, también existen momentos en nos sentimos insatisfechos, tenemos un malestar interno que no logramos descifrar o algo nos dice que tenemos que hacer algo. Se inicia así un tiempo de transición personal para descifrar lo que necesitamos y movernos en otra dirección.
Descubriendo nuestra nueva ruta
Cuando se encuentran ante una situación externa demandante, por lo general es sencillo descubrir lo que deben fortalecer. Por ejemplo, si en el trabajo han asumido una posición superior a la que antes tenían, posiblemente sea importante fortalecer habilidades para el liderazgo, entre otras.
Sin embargo, en las situaciones de cambio personal cuando no hay desencadenantes externos, la situación amerita hacer un proceso de reflexión más complejo. Les propongo hacer una serie de cuatro artículos sobre este tema, donde se pueda profundizar en cada una de las áreas que se señalan a continuación para que puedan explorar sus rutas de cambio.
Según investigadores del enfoque de las fortalezas personales, se clasifican en tres las áreas que frecuentemente se requiere atender en tiempos de transición.
- Profesionales, incluyendo las pertinentes a los emprendedores.
- Auto-desarrollo, desarrollo de capacidades psicológicas personales.
- Interpersonales, aunque ésta pudiera estar incluida dentro del auto-desarrollo, se coloca en una categoría aparte por su importancia.
En esta introducción al tema, destacaré dentro de cada categoría ejemplos de estas habilidades o capacidades que pudieran ser desarrolladas. Si están interesados en iniciar esta reflexión, les ofrezco el link del VIA Survey of Character Strengths, a través del cual pueden obtener sin costo alguno una categorización personal de sus fortalezas realizada por investigadores de la Universidad de Pennsylvania, USA.
Habilidades Profesionales
Dentro de estas habilidades destacan:
- Enfocarse. Mientras se solucionan los problemas en el corto plazo, se debe mantener la atención en lo que se desea en el largo plazo. En el caso de los emprendedores es fundamental que al decidir siempre tengan en mente la relación costo-beneficio, aunque se ha comprobado que es más beneficioso la motivación por logro y no por la posible ganancia.
- Determinación/resiliencia. En circunstancias adversas, perseverar aun ante obstáculos que parecieran insuperables. Aplicar la energía en actividades que puedan ayudarlos a avanzar, manteniendo en mente la visión global. Monitorear el progreso con hitos intermedios dentro de la estrategia asumida, con el fin de saber si está funcionando.
- Capacidad de Riesgo. Es importante aprender a tomar riesgos conociendo los límites de lo que se conoce, las preferencias y sesgos personales que pueden afectar el juicio sobre los resultados. Tomar los riesgos incrementalmente. Construir diferentes escenarios para guiar los procesos de toma de decisiones.
Auto-desarrollo
- Confianza en sí mismo/ Inteligencia emocional. Es importante incluir espacio de crecimiento personal para conocer las habilidades y los puntos débiles personales. Desarrollar las capacidades necesarias para relacionarse con otros, de acuerdo con las tendencias personales.
- Pensamiento creativo/Buscador de conocimiento. Practicar la capacidad imaginativa usando ideas existentes para proponer mejores versiones, siempre buscando nueva información que alimente el proceso. Identificar elementos con los cuales se puedan evaluar las ideas para asegurar su viabilidad. Separar los procesos de generación de ideas de los que evalúen su factibilidad, balanceando la eficiencia con la creatividad.
- Independencia/Auto-suficiencia. Sentirse preparado para realizar exitosamente lo que se necesite para cumplir metas profesionales o de emprendimiento. Aunque bien enfocado en el aquí y el ahora para garantizar el funcionamiento diario, debes alinear las metas de corto plazo con los objetivos de más largo alcance para garantizar el éxito de tu emprendimiento o meta profesional. La autonomía es beneficiosa, pero necesariamente el crecimiento requiere de alianzas estratégicas y de las conexiones que te puede brindar una red diversa de relaciones.
Habilidades interpersonales
- Delegar: Reconoces que no puedes hacer todo y estás dispuesto a desarrollar un nuevo estilo de control y estímulo. Para ello debes identificar que puedes delegar y a quien puedes poner a cargo. Incluir el tiempo de entrenamiento para hacer la labor como se desea. Ser paciente y dar la retroalimentación adecuada para poder incrementar la capacidad del equipo.
- Promover: Tomar en cuenta que el generador del proyecto o emprendimiento es el mejor promotor del mismo. Posicionarse como el experto, documentando y explicando a otros el proyecto del cual se está a cargo.
- Relacionar/Inteligencia Interpersonal: Tener una percepción alta para relacionarte y habilidad para construir relaciones beneficiosas para el trabajo en equipo y el crecimiento en lo que desees emprender o desarrollar. Diversifica tus redes, ampliándolas para incluir personas fuera de tu círculo inmediato. La reciprocidad es vital para mantener relaciones fuertes, por ello es importante renovar los contactos con frecuencia.
Espero que esta panorámica de un tema amplio como el desarrollo del poder personal, los entusiasme a profundizar en los aspectos que quieran fortalecer. En los próximos artículos les brindaré prácticas integrales para cada una de las áreas mencionadas.
Como siempre a la orden por mi correo electrónico para comentarios o aclaratorias.
Jeannette Díaz
Nota sobre la autora:
Jeannette Díaz es Doctora en Educación de la Universidad de Massachusetts, Amherst, Profesora Titular Jubilada de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela. Durante sus 28 años como docente, Coordinadora Académica y Coordinadora de Investigación disfrutó siendo mentora y coach de estudiantes y profesores apoyándolos en el desarrollo de sus habilidades creativas y progreso en sus carreras docentes. Formalizó esta área de interés cursando estudios y obteniendo la Certificación como Integral Master Coach® de Integral Coaching Canada. Es miembro de la Federación Internacional de Coaches en el nivel Profesional (PCC). Actualmente trabaja como coach, ayudando a profesionales creativos, arquitectos y emprendedores a cerrar la brecha entre sus expectativas y logros alcanzados. Página web de Jeannette Díaz
Un Comentario
Maria
Excelente artículo . Muy claro y con muchas herramientas. Gracias por compartirlo