Para cerrar el ciclo de los artículos sobre las ocho bases desarrolladas por el Dalai Lama y el Arzobispo Desmond Tutu en «El Libro de la Alegría« y como publicación final del año les ofrezco su «Meditación de la Alegría» y el ejercicio con el cual estos autores finalizan su libro para invitarlos a crear un mejor 2018.
Investigando para este artículo me reencontré con el trabajo de Michael Michalko, experto en el campo de la creatividad y referencia frecuente durante mi práctica docente en la Facultad de Arquitectura de la UCV. Entre la información desplegada en su página, vi un ejercicio donde se destacaba el papel del subconsciente en los procesos creativos, proponiendo un ritual antes de dormir. Me pareció interesante la coincidencia con la práctica final de «El Libro de la Alegría» que les incluyo.
Aprovechando este giro serendípico, en mis artículos del nuevo año pienso explorar temas relativos a los avances en el campo de la creatividad. Por ahora, anticipándome al nuevo ciclo les incluyo el enlace para el ejercicio de Michalko y una práctica inspirada en un artículo de Benjamín P. Hardy invitando la colaboración de nuestro subconsciente en momentos en que requerimos clarificación y/o generación de ideas.
Meditación de la Alegría (pp.343-345)
Las ocho bases que hemos comentado a partir de mayo de este año en Mirador Salud son los elementos de la Meditación de la Alegría. Esta meditación recomiendan hacerla cuando vivimos una situación que nos preocupa, tenemos un problema o sufrimos por algún motivo. Nos ayuda a calmar las vicisitudes de la vida, bien sean dificultades mayores o retos cotidianos. En ella se incluyen las cuatro bases generadas por la mente: perspectiva, humildad, humor y aceptación y las cuatro bases provenientes del corazón: perdón, gratitud, compasión y generosidad. A continuación detallo las instrucciones – resumidas del original – que puedes grabar para seguirlas más fácilmente:
- Busca un lugar adecuado donde puedas aislarte por media hora y siéntate cómodamente con la espalda recta.
- Respira profundamente varias veces, buscando relajar tu cuerpo.
- Permite que la situación o problema confrontado venga a tu mente.
- Perspectiva: visualízate a ti y a tu situación con una perspectiva más amplia, como si fueras parte de una película que puedes proyectar fuera de ti. Imagínate ver esta situación dentro de un año o una década. Observa como el problema se minimiza al sopesarlo dentro de tu línea de vida.
- Humildad: ubícate como una de los siete billones de personas que habitan este planeta y tu problema formando parte del dolor y sufrimiento que esas tantas personas padecen. Aprecia cuan conectados estamos los unos a los otros como parte del drama de la vida. Siente amor y consideración por todos aquellos que han contribuido a ser quién eres y por quienes te apoyan en tu día a día.
- Humor: sonríe y prueba a reírte de tu problema, de tus defectos y fragilidades. Busca una vena de humor dentro de la situación que estás viviendo, así sientas que es muy seria. Esta habilidad de reírnos de lo que nos pasa nos permite aceptar la vida como es, rota, imperfecta, aun aspirando por una vida mejor y un mundo mejor.
- Aceptación: acepta que estás batallando y que posees limitaciones humanas. Recuérdate que las realidades dolorosas nos suceden, les suceden a quienes amamos y al mundo entero. Acepta que no puedes hacer nada para cambiar el pasado y que lo mejor que puedes hacer para mejorar la situación es aceptar la realidad de su existencia.
- Perdón: coloca la mano en tu corazón y perdónate por lo que puedas haber contribuido a esta situación. Como humano herirás y serás herido. Ve la humanidad compartida en todos los que están involucrados y perdónalos por su parte y por sus limitaciones humanas.
- Gratitud: piensa en tres o más personas o en cosas relacionadas con este problema por las cuales estás agradecido. ¿Qué agradeces de tu vida en este momento? ¿Encuentras alguna forma en la cual este problema o situación estén contribuyendo a tu vida o a tu crecimiento? ¿Quiénes o qué están apoyándote en esta situación?
- Compasión: pon tu mano en el corazón o junta tus palmas sobre el pecho e invoca compasión por ti y por tu lucha. Recuerda que toma tiempo crecer y aprender. Siente la luz de tu amor-bondad irradiando desde tu corazón a todo tu cuerpo. Envíale ahora esa compasión a quienes amas, a quienes están en dificultades y a todos quienes necesiten amor y compasión.
- Generosidad: siente la profunda generosidad que alberga tu corazón. Imagínate diseminando esta generosidad de espíritu a todos alrededor tuyo. ¿Cómo puedes otorgar tus dones? ¿Cómo puedes transformar tu problema en una oportunidad para dar a otros? Recuerda que cuando proporcionamos alegría a otros experimentamos verdadera alegría en nosotros.
Ritual para crear un mejor año
«Nunca te vayas a dormir sin hacer una petición a tu subconsciente.»
Thomas Edison
Tanto psicólogos y analistas como expertos en creatividad, coinciden en señalar los beneficios de nuestro ciclo de la noche para empezar bien el día. También monjes y practicantes de distintas religiones y filosofías de vida recomiendan reflexionar sobre el día cumplido e iniciar el día siguiente recordando nuestras prioridades para animarnos en la ruta que queremos seguir. El propósito común de estas reflexiones es ayudarnos a estar más conscientes acerca de nuestras intenciones de vida, darnos cuenta de nuestros avances o retrocesos – sin enjuiciarnos por ello – y crear un estímulo que contribuya al cumplimiento de lo que deseamos lograr.
El descanso nocturn0 de nuestras actividades corporales no incluye la actividad cerebral. Nuestro cerebro no descansa. Aparte de controlar todas las funciones regidas por el sistema autónomo, aprovecha este tiempo para organizar el impacto de las experiencias del día, en relación a nuestro archivo de vida. Lo hace a través de nuestros sueños, conectando nuestro subconsciente y vida consciente e invitándonos a observar lo que vivimos con una mirada diferente.
Múltiples investigaciones, ahora apoyadas por más sofisticados instrumentos, demuestran la importancia no sólo del número de horas que requerimos para reparar los sistemas de nuestro cuerpo, sino de la calidad del tiempo al dormir. Aún más, nos pueden indicar el mejor momento para interrumpir nuestro sueño, sin disturbar sus ciclos si es necesario. Se tienen evidencias de cómo se puede también invitar o dirigir el subconsciente para ayudarnos a encontrar soluciones a un problema que deseamos resolver. Un ejemplo que pueden probar es éste brindado por Michael Michalko en su página. Verán como practicando este ejercicio regularmente, su subconsciente hará más fácilmente nuevas conexiones a partir del bagaje de información de sus experiencias y conocimientos acumulados.
Aplicando los principios de estas prácticas e integrándolas con las enseñanzas de «El Libro de la Alegría» les ofrezco el siguiente ejercicio para crear un mejor 2018, potenciando la energía mental de la cual disponemos como seres humanos.
Cada noche:
- Recorra los acontecimientos que destaquen para usted y evalúe sí estuvieron alineados con el o los propósitos inspiradores adoptados por la mañana.
- Preste atención a sus emociones aceptando lo que sienta, sin dejarse tomar por ellas, más bien como un observador compasivo. Si le surgen pensamientos negativos, no trate de descartarlos, tampoco regodearse de los positivos. Si se siente decepcionado por no haber hecho lo que se propuso, póngase la mano en el corazón y dígase que se acepta como es, con fallas humanas como los demás. Eso sí, preste atención a lo que le impidió cumplir con lo propuesto, es parte del necesario aprendizaje.
- Agradezca lo sucedido en el día, aunque haya sido duro o doloroso. Si está llevando un diario de agradecimiento aproveche para anotar sus agradecimientos del día.
- Escoja algo en particular que usted hizo y que le permitió sentirse bien. Celebre internamente, disfrútelo y alégrese. Si no consigue nada, ya el hecho de estar haciendo esta práctica es algo para alegrarse. Considere estos sucesos como bendiciones que se le han otorgado.
- Termine pensando en el día siguiente y escoja su propósito o intención acerca de cómo desea crear el nuevo día. Confíe en que usted será capaz de manejar lo que se presente y deje de lado sus preocupaciones para entregarse a un sueño reparador.
Al levantarse:
- Recuerde el propósito o intención escogida la noche anterior y alegremente empiece su día teniendo esto como norte.
- Para clarificar y/o reafirmar sus prioridades, es de gran ayuda escribir estos propósitos diariamente en un cuaderno especial para su trabajo interno. Y recuerde que no se trata de evaluar su productividad, ni su eficiencia alcanzando metas. Se trata más bien de ir haciéndonos más conscientes de nuestros procesos, fortaleciendo ese vínculo sutil entre lo que pensamos y lo que hacemos.
Invitando la colaboración de nuestro subconsciente:
- Si tiene algún asunto en particular para el cual requiera otra perspectiva u opciones para actuar, invite a su subconsciente a colaborar. Antes de dormir es el momento propicio.
- Precise lo que necesita clarificar o resolver escribiendo todas las preguntas que se le vengan a la mente sobre el asunto. Recuerde que su colaborador necesita estar lo más claro posible de lo que usted desea solucionar y que las neuronas de su área pre-frontal estarán dispuestas a trabajar buscándole nuevas conexiones.
- Cuando se levante, lo más pronto posible, tome de nuevo papel y lápiz y aprovechando que su mente ha estado en modo explorador recientemente, escriba todo lo que espontáneamente le surja acerca de lo que desea resolver o clarificar.
- Le recordamos de nuevo que invitar esta colaboración es una habilidad que requiere desarrollarse. Posiblemente para obtener los resultados que desee, debe intentarlo varias veces. Pero si persevera, su proceso para generar opciones creativas se hará cada vez más fácil y lo más importante, su amistad con su subconsciente se fortalecerá.
Termino este artículo con una cita del artículo de Benjamin P. Hardy, inspirador de este segmento. Como siempre, les agradezco sus comentarios por mi página web al experimentar con estas prácticas. Les deseo junto a sus familias abrir un compás de agradecimiento y alegría para esta Navidad y el Nuevo Año.
«La creación mental siempre precede a la creación física. Antes de construir un edificio se requiere diseñar planos. Tus pensamientos son los planos de la vida que estás construyendo día por día.
Cuando aprendes a canalizar tus pensamientos – tanto consciente como inconscientemente – creas las condiciones que necesariamente te llevarán a alcanzar tus aspiraciones.
Tu eres el diseñador de tu destino. Esta sencilla rutina te ayudará a cristalizar hacia dónde quieres ir y cómo vas a llegar allí».
Jeannette Díaz
Nota sobre la autora:
Jeannette Díaz es Doctora en Educación de la Universidad de Massachusetts, Amherst, Profesora Titular Jubilada de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela. Durante sus 28 años como docente, Coordinadora Académica y Coordinadora de Investigación disfrutó siendo mentora y coach de estudiantes y profesores apoyándolos en el desarrollo de sus habilidades creativas y progreso en sus carreras docentes. Formalizó esta área de interés cursando estudios y obteniendo la Certificación como Integral Master Coach® de Integral Coaching Canada. Es miembro de la Federación Internacional de Coaches en el nivel Profesional (PCC). Actualmente trabaja como coach, ayudando a sus clientes en el logro de transiciones exitosas en el ámbito personal o profesional. Página web de Jeannette Díaz