El Solsticio de Invierno es una significativa época del año, coincidiendo además con el fin de año en el hemisferio norte y considerada como época propicia para la introspección desde tiempos ancestrales. Así que aprovecharé los dos últimos artículos del año para invitarlos a valorar lo logrado y detectar los hilos que nos tiende el futuro para orientar nuestro devenir en el próximo año. También exploraremos temas, dificultades y retos que se nos presentan cuando aspiramos a modificar una situación donde nos encontremos.
En el artículo anterior “Cambio del hacer es cambio del ser” les comentaba sobre la situación personal que estaba experimentando, precisándola en el momento como un malestar existencial. Revisé referencias inspirando la metáfora de asumir el cambio como vestir una nueva piel y aceptar que al modificar nuestros hábitos necesariamente nos convertimos en personas diferentes. Cualquier cambio conductual amenaza nuestra identidad presente. Es por ello que cuesta tanto incorporar nuevas rutinas, aunque estemos convencidos de su beneficio.
Estuve revisando lo escrito en los inicios y fines de año desde 2014 y repasé mis anotaciones de transiciones importantes para detectar nuevos aspectos a hilvanar. Para precisar las diferencias entre transición y cambio acotamos que la palabra transición proviene del Latín transitio (n) del transire “atravesar”. En el uso moderno se define como el proceso de cambiar de una forma, estado, estilo o lugar a otro. Mientras que cambio es el resultado de un intercambio entre lo que se tiene por algo que lo sustituye. Se trata de un producto, un resultado.
En la publicación “Transition as the way through” [La transición como el camino a recorrer] encontramos la conceptualización psicológica de William Bridges, autor, consultor y antiguo presidente de la Asociación de Psicología Humanística, donde nos explica que “la transición es el proceso interno a través del cual las personas asimilan el cambio que les sucede”. Así este autor precisa la diferencia entre cambio – como resultado de la transformación – y la transición como el proceso interno que permite que el cambio suceda.
El proceso de transición según el modelo de Bridges incluye tres etapas:
- Finalización/Pérdida/Soltar. Durante esta etapa sentimos miedo, negación, tristeza, desorientación, frustración, amenaza, incertidumbre, sensación de pérdida.
- Zona neutral. En ésta domina el resentimiento hacia el cambio que se empieza a asumir como inevitable, baja la moral con disminución de la productividad, experimentamos ansiedad sobre nuestra identidad y estatus. También aflora el escepticismo acerca del cambio, sobre todo si proviene del exterior.
- Nuevo comienzo. Aceptación, retorna la esperanza, la inspiración, el orgullo.
Mucho quisiéramos que Bridges nos precisara los tiempos de duración de estas etapas, lo cual no es posible por tratarse de un proceso interno altamente individual, difícil de predecir. En la página web de su compañía consultora incluyen el artículo original Transition as “The way through” escrito por Bridges y revisado por Susan Bridges, su segunda esposa, quien añadió experiencias personales de transición del autor.
Revisando todo esto me percaté de que lo que estaba sintiendo como malestar existencial correspondía a los tiempos en la Zona neutral y lo que requería era vivir esta etapa lo más productivamente posible. Es decir, aceptar que no podía acelerarla a mi voluntad y mientras aprovechar para explorar las posibilidades que me brindaba el detenerme. Esta prospectiva me llenó de calma, al saber qué esperar y no seguir pensando en términos de tiempo. Igualmente me permitió precisar que debía atender dos aspectos durante el período que me llevará a estar en la Zona neutral:
- A veces no hemos finalizado o aceptado plenamente la pérdida de lo que estamos dejando atrás y por tanto no podemos asumir completamente nuestra estadía en la Zona neutral. ¿Nos hemos preguntado si estamos conscientes de lo que estamos dejando atrás? ¿Qué sentimos? Es necesario asumir estos sentimientos y no intentar negarlos o ignorar estas difíciles emociones.
- Entramos en problemas también al no reconocer plenamente la Zona Neutral cómo un “nuevo lugar temporal de llegada”, según Bill Burnett y Dave Evans, autores que elaboran sus planteamientos a partir de las tres etapas de Bridges. No se trata de conformarse con el estar en este limbo neutral hasta que pase el temporal, ni concebirlo solo cómo una etapa previa al destino final, sino, en palabras de Bill Burnett se trata de “un buen lugar para estar” mientras construimos posibles escenarios
Ahora, ustedes se preguntarán, ¿qué nos aporta todo esto para cerrar el año de la manera más provechosa para nuestra salud psicológica? Les comparto aquí mis conjeturas:
- La vida es un eterno fluir de sucesos donde generalmente destacamos los comienzos y finales.
- Si observamos este fluir bajo nuestro microscopio psicológico pudiéramos precisar los tiempos “no destacables” de las transiciones entre unas y otras etapas.
- Las zonas neutrales son los tiempos de incubación y sanación que hacen posible los comienzos y finales.
- ¿No creen que si le prestáramos atención plena a nuestro vivir pudiéramos potenciar esos tiempos de creación y cicatrización para crear nuevos y mejores sucesos?
Práctica para fluir en armonía y energizarnos para el nuevo año.
Esta práctica la realizaremos en dos entregas. A través de ella podremos sintonizar nuestro interior con los sucesos externos que vivimos. Hacer este ejercicio nos permitirá reconocer con mayor detalle los procesos que transitamos y al clarificar donde estamos podremos aplicar nuestras energías para potenciar nuestras habilidades y lograr lo que deseamos. Sobre todo podremos detectar los tiempos grises que usualmente activan respuestas de indiferencia y pasividad.
Preparación:
- Hagan una pequeña pausa y pregúntense si se sienten en paz consigo mismos o si sienten una disonancia entre lo que les sucede externamente y lo que sienten en su interior.
- ¿Desean aceptar mi invitación para lograr una mejor sintonía interna-externa e iniciar el nuevo año con renovadas energías?
- Si es así, entonces encuentren un tiempo y lugar grato adecuado para realizar el siguiente ejercicio. Tengan a mano un diario o cuaderno especial con algo para escribir o dibujar. Seleccionen uno o varios objetos significativos y accesorios que realcen la experiencia. Por ejemplo, piensen en un lugar tranquilo de su casa al amanecer o atardecer, prendan una vela, busquen una flor o una ramita como muestra de vida. También, si lo prefieren pueden hacer el ejercicio en un lugar favorito al aire libre.
1ª Parte: ¿Dónde me encuentro?
- Escojan un tiempo y lugar donde puedan estar tranquilos por 20 minutos aproximadamente. Incluyan en este espacio lo que deseen para enriquecer su experiencia. Tengan a mano lo que escogieron para escribir o dibujar.
- Tomen asiento de la manera que sea más cómoda para ustedes. Cierren los ojos y respiren lentamente recorriendo su cuerpo. Observen su respiración sin forzar el ritmo natural. Recorran su cuerpo atentamente y a medida que lo hagan relajen las distintas partes, empezando por la cabeza hasta los pies.
- Al hacer el recorrido por su cuerpo, si detectaron tensión en alguna parte (hombros, cuello etc.) retornar a ese punto y respirar aflojándolo con movimientos suaves al exhalar.
- Ahora visualicen un panorama de su vida en este momento. Deténganse un momento allí y exploren cómo se sienten.
- Abran el diario donde escogieron escribir y anoten tres palabras que describan las emociones que sienten. Pueden también dibujar lo que espontáneamente les surja.
- Ahora expongan brevemente lo que sucede exteriormente en su vida en este momento.
- ¿Encuentran coherencia entre lo que sienten y lo que está sucediéndoles? Si están atravesando un período de duelo por una pérdida cercana, es natural que se sientan tristes. Si han dibujado algo ¿qué les dice ese dibujo al observarlo?
- Ahora evalúen lo que escribieron a la luz de un proceso de transición. ¿Pueden determinar la fase en la cual están? ¿Están en la fase de finalización, en una fase neutral o iniciando algo distinto?
- Escriban brevemente cómo se sienten en relación a la fase donde están o al proceso de transición en general.
- Cierren esta primera parte del ejercicio agradeciendo haberlo hecho.
En el próximo artículo les brindaré prácticas específicas para navegar mejor cada una de estas fases. Si quieren comentar sobre su proceso personal para asegurarse que incluya aspectos que ustedes consideren pertinentes, pueden escribirme a través de este artículo en MiradorSalud.
Espero que les entusiasme hacer esta práctica, la cual seguramente les brindará más claridad a sus planes para el nuevo año. Siempre agradecida por su lectura y de los comentarios que deseen hacer a los mismos.
Jeannette Díaz
Fotografía: Davidson Luna de Unsplash
Nota sobre la autora:
Jeannette Díaz es Doctora en Educación de la Universidad de Massachusetts, Amherst, Profesora Titular Jubilada de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela. Durante sus 28 años como docente, Coordinadora Académica y Coordinadora de Investigación disfrutó siendo mentora y coach de estudiantes y profesores apoyándolos en el desarrollo de sus habilidades creativas y progreso en sus carreras docentes. Formalizó esta área de interés cursando estudios y obteniendo la Certificación como Integral Master Coach® de Integral Coaching Canada. Es miembro de la Federación Internacional de Coaches en el nivel Profesional (PCC). Actualmente trabaja como coach, ayudando a profesionales creativos, arquitectos y emprendedores a cerrar la brecha entre sus expectativas y logros alcanzados. Página web de Jeannette Díaz.