A Carlos Alberto Pérez Schael.
Continuando con el tema de pérdidas y desperdicios de alimentos (PDA) es importante recordar que lograr el reto del Hambre Cero lanzado por Ban Ki-moon en 2012 pasa por reducir las PDA a cero (*). Esto es una tarea monumental, pero, como lo dice un formidable reportaje de National Geographics, si hay algo bueno en la impactante escala global de PDA es la cantidad de oportunidades de mejora que presenta. Sin embargo, las PDA se consideran el punto débil en la lucha contra el hambre.
(*) junto a que todos los sistemas alimentarios sean sostenibles, aumentar un 100% la productividad y el ingreso de los pequeños productores, que el 100% de las personas tengan acceso a una alimentación adecuada durante todo el año, y que haya cero retraso en el crecimiento en niños y niñas menores de dos años)
En la lucha contra PDA, la prevención juega un papel primordial. Y eso es una regla de oro. Veamos un ejemplo en el tema hotelero yendo a la Caja de Herramientas que se presentó en el artículo anterior, por ejemplo, a Catering y Eventos, área en la que es muy interesante cómo se aborda la reducción de PDA en términos de Prevención y reúso de recursos, en aspectos que van desde las conversaciones de ventas con los clientes, la planificación del menú y los recuentos precisos de invitados, hasta sugerir incluir en el contrato, acuerdos de donación de la comida que quede después del evento.
La declaración de principios en este punto reza así: La prevención del desperdicio de alimentos es fundamental en el trabajo diario y la máxima prioridad. No solo ahorrará dinero, sino que evitará que se desperdicien recursos valiosos, como el agua necesaria para producir cultivos, la energía para el crecimiento y el transporte de alimentos y el hábitat natural que se afecta con la agricultura.
Esto está totalmente de acuerdo con los altos fines y compromiso que tenemos con el planeta, medioambiente, y la sostenibilidad. Sin embargo, puede parecer declarativo, principista y teórico. No obstante, si avanzamos en la Caja de herramientas, el siguiente paso es: Recuperar restos de comida ¿Tiene su hotel un programa de donación?:
Donación: la segunda línea de defensa: Cuando la prevención y la reutilización dentro de un hotel no son posibles, la siguiente línea de defensa es la donación de alimentos sanos para el consumo humano (alimentos perecederos no deteriorados, y no perecederos) para alimentar a nuestras comunidades, trabajando con socios en bancos de alimentos, comedores populares, despensas y refugios. Recomendamos dar un vistazo al video que aparece en el link anterior, de Sustainable Events Network, Florida & Caribbean y la Asociación Nacional de Catering y Eventos sobre la creación de un programa de Donación. En E.E.U.U. los donantes están protegido por la Ley Bill Emerson Good Samaritan Act de 1996.
Trabajar con un socio de donación puede disminuir los costos de transporte de desechos, mejorar la moral de los empleados y beneficiar a la comunidad local. Por ejemplo, impulsado por el proyecto de World Wildlife Fund (WWF), Terranea Resort estableció una relación con Chefs to End Hunger para donar comida sobrante y comestible de los banquetes. Un adicional de 30 minutos de tiempo del personal por evento permitió la donación de 100 libras de alimentos.
El identificar Socios de recuperación de alimentos es un punto clave. Recordemos que esta caja de herramientas fue elaborada con proyectos de hoteles en E.E.U.U., donde la mayoría de las grandes ciudades tienen múltiples organizaciones de rescate y recuperación de alimentos que trabajan con los hoteles para programar recogidas, redactar acuerdos que limiten aún más la responsabilidad de los hoteles, además de proporcionar suministros y orientación sobre lo que se puede donar. Esto es tan institucional que recomienda obtener asesoramiento sobre cómo encontrar un socio confiable recurriendo a fuentes tan serias como:
- El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, que explícitamente señala que las donaciones de alimentos perecederos preparados, generalmente recolectados de hoteles, restaurantes, empresas de catering, comedores corporativos, y otros establecimientos de alimentos, también juegan un papel importante en la alimentación de las familias necesitadas, aunque tales donaciones generalmente requieren un manejo especial, como camiones refrigerados y distribución rápida. Inmediatamente, se proporciona una lista de algunas organizaciones benéficas para la donación de alimentos en USA: Conózcala y se sorprenderá.
- Feeding America (organización de beneficencia líder en E.E.U.U. en ayuda alimentaria con una red de 200 bancos de alimentos que a su vez apoyan aproximadamente a 61.000 agencias de beneficencia locales y a 70.000 programas que brindan alimentos directamente a las personas y familias necesitadas), y
- Further with Food (centro de recursos virtuales de la Fundación Rockefeller, la USDA, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y una asociación de 10 organizaciones privadas y sin fines de lucro: «un centro en línea para el intercambio de información y soluciones que pueden ayudar a cumplir el objetivo nacional de reducir el desperdicio de alimentos a la mitad para 2030».
Algo muy importante es que cada socio tendrá requisitos particulares para recibir alimentos y los tipos de alimentos que pueden aceptar. Para todas las donaciones se debe cumplir con los estándares de inocuidad alimentaria y cualquier estándar adicional requerido por su socio de donación para enfriar adecuadamente los alimentos después de un evento, almacenarlos y etiquetarlos. Una vez establecida la asociación, con el tiempo será más fácil satisfacer sus necesidades. Conservar la cadena de frío es una de las principales preocupaciones, por eso, son ideales socios cercanos geográficamente. Algunas grandes empresas donan o proporcionan transportes refrigerados.
Venezuela
Las grandes oportunidades para ayudar a los demás rara vez vienen, pero las pequeñas nos rodean todos los días. (Sally Koch)
En nuestro país hay hambre, desnutrición y pobreza. Acabamos de ver algunos resultados de ENCOVI 2017, que revela que los venezolanos han perdido un promedio de 11,4 kilos de peso durante el año 2017 debido a severa crisis de alimentos que sufre el país y no tienen con qué pagar los pocos alimentos que se consiguen. 61% de los venezolanos dijo que se ha acostado con hambre por no tener dinero para comer. Entre 2014 y 2017, los hogares pobres aumentaron de 48,4% a 87%. El crecimiento de la pobreza crítica es aún mayor. 90% de los encuestados dijo que no le alcanza el dinero para comer, y 70% aclaró que es insuficiente para adquirir comida balanceada y variada. La dieta tradicional continúa perdiendo calidad y cantidad. Por primera vez el arroz se ubica como el alimento más consumido por los venezolanos La dieta se centra en arroz, maíz, harina de trigo y tubérculos y la variedad que todavía en 2016 daban las hortalizas se redujo de manera significativa en 2017. Las fuentes de hierro y otros micronutrientes se han reducido por la disminución en el aporte de hortalizas y frutas y harina de maíz no enriquecida. En otras palabras: Una tragedia alimentaria.
La realidad venezolana ha sensibilizado a la sociedad. En mayo de 2017, un artículo titulado “Organizaciones que alimentan al Prójimo Venezolano” contabilizaba 54 ONGs y organizaciones espontáneas que han surgido en Venezuela ante la crisis, las cuales cuentan con recursos limitados para atender todas las peticiones de ayuda. Con seguridad hay muchas más. Por ejemplo, el día de ayer (26/02/2018) vimos esta noticia: La fundación Cuatro Por Venezuela consolida su alianza con la fundación Acción Humanitaria por Venezuela con el apoyo al programa Nutriendo La Esperanza con el que se busca atender a la población de Turgua, zona rural de El Hatillo en Caracas.
Las iniciativas surgen desde muchos sectores. Recientemente hemos conocido de Tejiendo Nidos nueva plataforma cultural para crear proyectos sociales a través del arte, particularmente para contribuir a mejorar la dramática situación de carencia que viven muchos niños venezolanos en cuanto a la falta de alimento, en alianza con Barriga Llena Corazón Contento, ONG que lleva diariamente sopas a los pacientes del J.M de los Ríos.
Los hoteles y restaurantes venezolanos tienen en frente una estupenda oportunidad para organizarse en este sentido, pues podrían implementar convenios de donación con organizaciones de beneficencia, instaurar sus procedimientos de donación, establecer un horario regular de recogida que se adapte a su horario de generación de alimentos y que se proporcione la refrigeración adecuada y las prácticas detalladas de manejo de inocuidad alimentaria. Otra buena idea es formar una alianza con otros hoteles locales para superar juntos los obstáculos comunes a la donación de alimentos.
Algo así como un “delivery” desde los hermosos bufetes de las cadenas hoteleras para paliar el hambre de nuestras comunidades.
María Soledad Tapia
maria.tapia@5aldia.org.ve
Fotografías:
- Proyecto Plato Lleno
- Fundación Barriga Llena Corazón Contento
- Almuerzo en el comedor social de Los Teques, Edo. Miranda, Venezuela (Fuente: Meridith Kohut, The New York Times)
5 Comentarios
Irene Perez Schael
Excelente artículo y excelente oportunidad para ejercer la solidaridad entre venezolanos, particularmente en estos tiempos tristes, desamparados y de hambre que vive Venezuela.
Espero que sirva de estímulo a los sectores involucrados.
Gracias María Soledad por tan hermosa y necesaria propuesta.
lirio valero
Valiosa iniciativa que merece del apoyo de los todos sectores que se identifiquen con tan loable labor. Admiro como EEUU, país tan capitalista e inhumano, cómo lo han caracterizado los comunistas, se preocupe por la alimentación de sus ciudadanos y siempre está a la vanguardia en lo concerniente, entre otros, al bienestar integral de sus comunidades. El desarrollo es mental. No tiene que ver con el populismo que humilla y somete a la más cruel de las hambrunas, LA FÍSICA Y LA ESPIRITUAL.
JUan Perez
interesante articulo
Mirador Salud
Muchas gracias Juan. Ojalá se pueda poner en práctica en Venezuela.
Mirador Salud
Muchas gracias Juan. Ojalá se pueda poner en práctica en Venezuela.