Un reciente comentario en la revista científica británica The Lancet por Navarro et al. 2017, bajo el título «A la caza de parásitos ocultos: el Trypanosoma cruzi«, coloca de nuevo en el tapete el problema de la enfermedad de Chagas en países no endémicos como España y Estados Unidos (EUA).
La enfermedad de Chagas, también conocida como tripanosomiasis americana o Mal de Chagas, es una enfermedad parasitaria tropical, generalmente crónica, causada por el protozoo flagelado Trypanosoma cruzi. La dolencia es endémica en las Américas, distribuyéndose desde México hasta Sudamérica, aunque existen vectores y reservorios incluso en el sur de EUA, en la actualidad se considera una enfermedad emergente, con casos identificados en Canadá, EUA y España.
La infección por el parásito protozoo Trypanosoma cruzi lleva el nombre del médico brasileño Carlos Chagas, quien descubrió el parásito. La infección inicial se distingue de las manifestaciones clínicas más severas que se desarrollan años después, como la destrucción de los ganglios parasimpáticos; miocardiopatía chagásica o disfunción del esófago o del colon.
La infección es transmitida por un insecto triatomino, los cuales son una subfamilia de insectos perteneciente a la familia Reduviidae del orden Hemiptera, conocidos a través de diversos nombres en diferentes regiones: vinchuca (desde Ecuador hasta la Patagonia), chipo (Venezuela), pito (Colombia), chirimacha (Perú) y barbeiro (Brasil), entre otros. Todas las especies de triatominos son vectores potenciales de la enfermedad de Chagas pero especies como Triatoma infestans, Rhodnius prolixus, Triatoma dimidiata, Triatoma brasiliensis y Panstrongylus megistus son buenos transmisores del Chagas en humanos. Los triatominos infectan a las personas a través de las picaduras. Existen mecanismos alternativos de transmisión de la enfermedad por vías como sanguínea, congénita, intrauterina, lactogénica o transmamaria, por alimentos contaminados, por trasplante de órganos o por accidentes de laboratorio.
La enfermedad de Chagas es endémica en América Latina, donde afecta a alrededor de 5,7 millones de personas cada año, actualmente es una enfermedad de preocupación global, principalmente por la migración de las poblaciones humanas. Después de EUA con más de 300.000 infectados, España es el segundo con más de 50.000 infectados. Estos números reclaman con urgencia la adaptación de la legislación para controlar los principales mecanismos alternativos de transmisión de Trypanosoma cruzi como son las transfusiones de sangre y hemoderivados, y el trasplante de órganos. Por ejemplo, el estudio de Navarro y colaboradores señala que la búsqueda del parásito en los donantes de sangre y donantes de órganos ha sido obligatorio en España desde hace varios años. Sin embargo, estas medidas son insuficientes porque la transmisión de madre a hijo continúa, en líneas generales, sin ser detectada. Los investigadores claman por una regulación europea común para implementar una estrategia coherente y unificada para detectar y tratar casos congénitos de la enfermedad de Chagas.
Las evidencias señalan que en Europa más del 90% de las personas infectadas con Trypanosoma cruzi no son diagnosticadas, por lo que existe una necesidad urgente de detectar estas infecciones ocultas. Desafortunadamente, los pacientes y los profesionales de la salud necesitan estar más informados sobre la enfermedad de Chagas, para evitar el persistente subdiagnóstico y el diagnóstico tardío.
El estudio de Navarro y colaboradores, demostró como la ejecución de programas educativos y de participación comunitaria sobre la enfermedad de Chagas en emigrantes latinoamericanos en España, mejoraron la eficiencia del diagnóstico de la población infectada, ayudando a controlar la transmisión de la enfermedad de Chagas en países no endémicos y ofreciendo atención integral para mejorar la calidad de vida de la población afectada. Los investigadores esperan llamar la atención de las autoridades de salud pública para implementar medidas integrales de detección y control que beneficien a la Unión Europea, los EUA y otras regiones no endémicas de la enfermedad de Chagas.
Felix J. Tapia
Nota: La imagen es de Photo Credit: Content Providers(s): CDC/ Dr. L.L. Moore, Jr. [Public domain], via Wikimedia Commons.
Nota sobre el autor: Felix J. Tapia se define en su blog como biólogo, inmunólogo, parasitólogo, rockero, farandulero, ucevista y venezolano. Biólogo de Concordia University, Montreal, Canadá e inmunólogo de la Universidad de Londres, Reino Unido. Profesor Asociado de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y Jefe del Laboratorio de Biología Molecular, Instituto de Biomedicina, UCV. Ha publicado más de 100 artículos en revistas científicas y capítulos en libros. Premio Fundación Empresas Polar “Lorenzo Mendoza Fleury” 2005. Fue miembro de comités editoriales de las revistas Histology and Histopathology, Acta Microscopica, Dermatología Venezolana, Vitae, Immunobiology; y actualmente de Our Dermatology, Journal of Microbiology & Experimentation e International Journal of Clinical Dermatology & Research. Activo en el ciberespacio con publicaciones en Blog Felix J. Tapia, Piel Latinoamericana, Código Venezuela, RunRunes y DermPathPro.