Tomar diariamente un vaso de jugo de remolacha reduce significativamente la presión arterial (PA) en personas hipertensas, incluso en aquellas cuyos elevados valores de PA no se controlan con medicamentos. Esto lo dice nada más y nada menos que la prestigiosa revista Hypertension de la Sociedad Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés), en su número de enero de 2015. La razón es que la remolacha contiene altos niveles de nitrato inorgánico, lo mismo que otras hortalizas como célery, berro, lechuga, espinaca, rúgula, endivia, hinojo, ajoporro, y las coles.
Esta investigación ha probado que la ingesta diaria de una dosis de nitrato inorgánico puede ser tan efectiva como una intervención terapéutica para reducir la hipertensión, y esa dosis puede ser obtenida a partir de remolacha y de otras hortalizas de hojas verdes.
¿Por qué es importante el nitrato? Porque en nuestro organismo el nitrato inorgánico se convierte en óxido nítrico (Nitric Oxide, NO), un gas que relaja y dilata los vasos sanguíneos y actúa como neurotransmisor.
Los nitratos dietarios son esencialmente inertes y adquieren actividad biológica sólo después de su reducción a nitrito. Los nitratos de los alimentos son transformados en nitritos por microorganismos de nuestra garganta y esos nitritos son transformados a su vez en NO. Entonces, como tal, el nitrato sirve como una fuente para la producción de nitrito y de NO, así como de otros productos metabólicos, a través de reducciones sucesivas.
Óxido nítrico (NO)
El óxido nítrico (NO) si bien lo conocemos como un gas inestable, tóxico y contaminante, expelido en los gases de los escapes de los vehículos automotores, tiene importantes actividades biológicas y terapéuticas. Es fundamental no sólo para nuestra salud cardiovascular sino también para la función del cerebro y el sistema inmunológico, pues transmite señales en la mayoría de los seres vivos para ayudar a dilatar las arterias, activar las células nerviosas y aumentar el número de glóbulos blancos de la sangre para hacer frente a las infecciones.
Como curiosidad se conoce por ejemplo, que los tibetanos que vivenen altitudes donde hay menor concentración de oxígeno en el aire, tienen mayores concentraciones de NO en su sangre que quienes viven a nivel del mar.Se cree que este NO adicional dilata los vasos sanguíneos de los tibetanos aumentando el flujo de sangre que asegure que llegue suficiente oxígeno asus tejidos.
El óxido nítrico (NO) fue nombrado en 1992 por la revista Science, «molécula del año», pero tomó otros 6 años para que los científicos responsables de los grandes descubrimientos que lo involucran, ganaran el Premio Nobel de Fisiología o Medicina de 1998. Y esto fue enunciado así: El óxido nítrico es un gas que transmite señales en el organismo. La transmisión de la señal por un gas que es producido por una célula y penetra a través de las membranas y regula la función de otra célula representa un principio completamente nuevo para la señalización en sistemas biológicos. A los descubridores del óxido nítrico como “molécula señal” se les otorga el Premio Nobel.
Entre las funciones vitales de la molécula de NO como mensajero intercelular, se encuentra el control de la presión arterial, del flujo sanguíneo, es vasodilatador de musculatura lisa vascular, mejora la erección masculina (se le llama el “viagra” natural), mejora de la micro circulación cerebral. Las alteraciones en el metabolismo del NO generan patologías como hipertensión, hipercoleresterolemia, diabetes, envejecimiento, tabaquismo, disfunción eréctil e insuficiencia cardiaca.
El aerosol y las tabletas de nitroglicerina tradicionales para tratar episodios de angina de pecho (dolor en el pecho) en personas que tienen enfermedad de las arterias coronarias (estrechamiento de los vasos sanguíneos que irrigan sangre al corazón) mediante la dilatación de los vasos reduciendo la carga del corazón, realmente lo que hacen es liberar NO que relaja los vasos sanguíneos y hace que la sangre fluya con más facilidad.
¿Y el jugo de remolacha?
El estudio con el jugo de remolacha fue realizado en la Universidad Queen Mary de Londres (QMUL) en el Reino Unido, financiado por la Fundación Británica del Corazón.
Para el ensayo se reclutaron 64 pacientes de 18-85 años de edad. La mitad de los pacientes estaba medicada para reducir la hipertensión pero no conseguían bajarla a los valores objetivos, y el resto que había sido diagnosticado con PA alta, aún no estaba bajo medicación.
Los pacientes fueron estudiados minuciosamente durante 8 semanas, y fueron asignados aleatoriamente a uno de dos grupos. Un grupo consumió diariamente un vaso (250 ml o alrededor de 8,5 oz) de jugo de remolacha, y el otro grupo tomó un vaso de jugo de remolacha, pero libre de nitratos (el placebo). Ambos grupos consumieron el jugo de remolacha diariamente durante 4 semanas.
Los pacientes que tomaron jugo de remolacha -con su nitrato inorgánico natural- experimentaron una reducción en la presión arterial de 4 y 8 mmHg (milímetros de mercurio) en la presión sistólica (cuando el corazón está bombeando) y en la presión diastólica (cuando el corazón se relaja), respectivamente.
Para muchos pacientes, esta reducción 08/04 mmHg fue suficiente para llevar la presión arterial de nuevo al rango normal. Sin embargo, en las 2 semanas posteriores a la suspensión de la ingesta del jugo, la presión arterial de los pacientes regresó a sus altos niveles anteriores.
Los autores señalan que la reducción lograda es comparable a la obtenida con medicación por vía de un único fármaco que es de 09/05 mmHg.
También se obtuvo una mejora de la función endotelial (mejora de la capacidad de dilatación de los vasos sanguíneos) de un 20% y la rigidez arterial se redujo en un 10%, mientras que no hubo cambios en el grupo placebo durante el período del estudio.
Las conclusiones sugieren el nitrato dietario como un tratamiento asequible, fácilmente disponible, coadyuvante en el tratamiento de los pacientes con hipertensión.
Ahora bien, aproximadamente el 80% de los nitratos en la dieta se derivan del consumo de hortalizas; y las fuentes de nitritos son hortalizas, frutas y carnes procesadas. Los nitritos se producen de forma endógena a través de la oxidación del NO, y a través de una reducción de nitrato por bacterias comensales en la boca y el tracto gastrointestinal.
Las frutas y hortalizas como fuente dietaria de nitratos y nitritos pueden contribuir de manera importante a los efectos reductores de PA que se incluyen en el plan dietario “Enfoques Alimentarios para Detener la Hipertensión” (DASH, por sus siglas en inglés).
Se recomienda un artículo publicado por en el año 2009 en el American Journal of Clinical Nutrition, titulado “Fuentes alimentarias de nitratos y nitritos: el contexto fisiológico para sus potenciales efectos benéficos para la salud”, en el cual aparece el contenido de nitritos y nitratos en las frutas y hortalizas ricas en esto compuestos, así como su clasificación de acuerdo a su contenido de nitratos.
El artículo propone revisar las normas que limitan la ingesta de nitrato y nitritos por su riesgo potencial de producir cáncer gastrointestinal y de metiohemeglobinemia en niños, sobre todo cuando son derivados a partir del consumo de alimentos de origen vegetal. La fuerza de la evidencia que vincula los efectos beneficiosos para la salud obtenidos por el consumo de alimentos de origen vegetal ricos en nitratos y nitritos incluso apoya la consideración de estos compuestos como nutrientes.
Se recomienda no hervir los vegetales ricos en nitratos porque este se disuelve en agua y se pierde. Por el contrario, se exhorta a consumirlos al vapor, horneados, o en jugos.
Se debe tener en cuenta igualmente que una dieta rica en nitratos puede interactuar con ciertas medicaciones tales como nitrato orgánico (nitroglicerina), o con drogas que contienen nitritos que se usan para las anginas de pecho como el sildenafil citrato, tadalafil, y vardenafil.
Puede encontrar importante información acerca de la remolacha en este link:
¿Cuáles son los beneficios de salud de la remolacha?
María Soledad Tapia
Maria.tapia@5aldia.org.ve