Las cosas están mejorando un poco. Nos emociona reportar avances tres años de seguido», dijo Howse. «Pero la tasa de nacimientos prematuros es demasiado alta».
Vermont, que ya tiene una tasa de 9.3 por ciento, fue el único estado en recibir una «A» en la Tarjeta de calificaciones sobre los nacimientos prematuros de 2011 de March of Dimes.
Las calificaciones se obtuvieron al comparar la tasa de nacimientos prematuros de cada estado con la meta de 2020.
En todo el país, las nuevas cifras representan un declive de casi cinco por ciento frente a 2006, cuando la tasa de prematuridad alcanzó un punto máximo de 12.8 por ciento de todos los partos. La mejora resultó en ahorros de casi dos mil millones de dólares en costos de la atención de salud y relacionados, según la organización.
Cualquier nacimiento que ocurra antes de las 37 semanas de gestación se considera prematuro, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. Es la principal causa de muerte entre los recién nacidos, y puede causar problemas graves de salud en los que sobreviven. Los bebés nacidos prematuramente pueden sufrir de discapacidades intelectuales, problemas de respiración, parálisis cerebral, problemas digestivos y pérdida de la vista y el oído durante toda la vida, informan los CDC.
Entre los factores de riesgo de nacimiento prematuro se hayan tener una enfermedad crónica (como obesidad, hipertensión o diabetes), fumar o usar drogas ilícitas en el embarazo, ciertas infecciones, y tener más de un bebé (gemelos o más), según CDC. Un nacimiento prematuro previo también aumenta las probabilidades, pero el nacimiento prematuro también puede ocurrir en mujeres que no tienen ninguno de estos factores de riesgo.
En general, EE. UU. recibió una «C» en la nueva tarjeta de calificaciones, publicada el 1 de noviembre. Alabama, Mississippi, Luisiana y Puerto Rico recibieron calificaciones de «F». Once estados (la mayoría en el sur) y el Distrito de Columbia recibieron «D». Diecinueve estados merecieron una «C», y 16 una «B».
Howse señaló que al menos cuatro factores han tenido un impacto sobre la tasa de nacimientos prematuros. Uno es que la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) de EE. UU. aprobó un nuevo tratamiento, las inyecciones de progesterona, para tratar a las mujeres que ya han tenido un parto prematuro y ayudar a prevenir otro. Otro motivo importante del declive es que menos mujeres fuman en el embarazo. La tasa de tabaquismo pasó de 19.6 a 17.6 por ciento de las mujeres en edad fértil, según la tarjeta de calificaciones.
El tercer factor es que se realizan menos inducciones de parto electivo y cesáreas antes de las 39 semanas de gestación, y el cuarto es una ligera mejora en el porcentaje de mujeres que reciben atención prenatal temprana, según Howse.
«Creo que realmente observamos una reducción en los nacimientos prematuros tardíos. Ha habido más y más evidencia sobre la necesidad de no realizar partos electivos antes de las 39 semanas», señaló la Dra. Deborah Campbell, directora de la división de neonatología del Centro Médico Montefiore en la ciudad de Nueva York.
Howse señaló que algo que no está tan claro es cómo lograr avances para la mitad de nacimientos prematuros que no tienen causas conocidas. «Tenemos que estudiar el problema y desarrollar intervenciones», aseguró.
La tarjeta de calificaciones también mostró algunas diferencias geográficas significativas en los nacimientos prematuros. Las mayores tasas se observaron en los estados del sur. Howse dijo que ciertos factores de riesgo podrían hallarse en esos estados, como la obesidad y el tabaquismo.
Sin embargo, aseguró que en general «vamos en camino del éxito». «Esta tendencia se ha sostenido por tres años de seguido, y los epidemiólogos estarían dispuestos a llamarlo una tendencia». Pero medio millón de bebés aún nacen demasiado pronto en EE. UU., lamentó.
La moraleja de la tarjeta de calificaciones es que «es importante planificar el embarazo», aseguró Campbell. «Más del 50 por ciento de los embarazos de EE. UU. no son planificados. Todavía falta mucha educación y alcance para asegurar que las mujeres tomen ácido fólico antes del y durante el embarazo y que estén en buena salud cuando conciban».
Fuente: Publicado en Medline Plus el 03-11-11.
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/news/fullstory_118260.html (*estas noticias no estarán disponibles después del 01/31/2012)
Traducido del inglés: miércoles, 2 de noviembre, 2011
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare