Comunicado de las organizaciones de la sociedad civil venezolana en relación al Reporte de Situación sobre el escalamiento humanitario de la ONU en Venezuela
May 31, 2019 | Emergencia Humanitaria Compleja |
(Caracas, 30.05.2019). En relación a la reciente publicación del primer Reporte de Situación sobre el Escalamiento Humanitario en Venezuela elaborado por la Organización de las Naciones Unidas, las organizaciones y personas aquí firmantes hacemos del conocimiento público lo siguiente:
- Tomamos nota del hecho de que por primera vez se admita públicamente la existencia del Equipo de Coordinación de la Cooperación y la Asistencia (ECCA) como el Equipo Humanitario de País, lo cual es expresión clara de que Venezuela se encuentra atravesando una emergencia humanitaria compleja que desde hace más de 4 años fue advertida por organizaciones de la sociedad civil ante instancias nacionales e internacionales y exige una respuesta de gran escala coordinada por Naciones Unidas.
- Expresamos nuestro malestar no sólo por la respuesta tardía del Sistema de las Naciones Unidas (SNU) frente a esta grave situación que ha cobrado muchas vidas y sufrimiento de venezolanos y venezolanas, sino también por el hecho de que el Reporte de Situación es un documento desbalanceado e incompleto, que deja por fuera una perspectiva amplia de la gravedad de la emergencia humanitaria compleja y las necesidades de ayuda y atención en todo el país. Al privilegiar solamente las actividades adelantadas por el SNU, se impide poner en perspectiva el impacto de la respuesta frente a las necesidades. Tal como está, el Reporte de Situación puede llevar a conclusiones erróneas sobre la dimensión de lo que ocurre en Venezuela y jugar en contra de la formulación y ejecución de una respuesta adecuada y proporcional a la magnitud de las necesidades humanitarias de la población venezolana.
- Expresamos nuestra profunda preocupación y alarma ante el hecho de que el Reporte de Situación original incluía información que no se corresponde con la realidad en el terreno, lo cual fue debidamente denunciado por las organizaciones de la sociedad civil que trabajan en la defensa de las personas con VIH. La versión original hablaba de 10 millones de medicamentos para el tratamiento del VIH que habían beneficiado a 50.000 personas por 3 meses en 24 estados. Horas después de haberse hecho público este Reporte de Situación, fue reemplazado por una nueva versión que corregía la original, señalando que se distribuyeron 1.6 millones de tabletas a las farmacias especializadas de VIH en 24 estados del país, con lo cual se espera iniciar o reactivar el tratamiento de al menos 30.000 personas con VIH en los próximos meses.
- Lo anterior es un hecho grave que nos preocupa no sólo porque se hizo el cambio de una versión a otra sin aviso ni explicación alguna, sino también por la discrepancia entre ambas versiones y la magnitud de dicha discrepancia. Esta situación pone en evidencia dificultades de coordinación interna y de gestión de información del SNU, que dejan en entredicho la seriedad y transparencia del mismo, no mostrándose a la altura de las exigencias de la crisis venezolana.
- Observamos con inquietud que en ambas versiones se destaca la participación de la sociedad civil, específicamente en la respuesta en materia de VIH/SIDA, cuando dicha participación ha sido impedida por el Estado venezolano, hecho conocido por el SNU en Venezuela. Más aún, en los últimos días se han producido represalias por parte de las autoridades en contra de activistas en VIH/SIDA tras haberse hecho público un comunicado denunciando la discrepancia en las cifras incluidas en las dos versiones del Reporte de Situación divulgado por Naciones Unidas.
- Exigimos que el equipo de las Naciones Unidas tenga muy presente en sus operaciones y actividades el contexto de represión, hostigamiento y debilidad institucional que caracteriza a Venezuela, en particular las represalias en contra de defensores y defensoras de derechos humanos y de actores humanitarios. En ese sentido, hacemos un llamado a que la acción humanitaria no sólo se centre en la entrega de ayuda, sino en la protección de quienes están involucrados en la misma, bien sea en la entrega como en la recepción.
- Considerando que el Reporte de Situación debe describir la emergencia humanitaria tal como lo dice su propio nombre, y entendiendo que su fin es tanto informar como alertar acerca de la escala y alcance de la emergencia, así como de las brechas de atención a las necesidades humanitarias, lamentamos que en él solo se haya hecho mención en una frase corta a la existencia de “importantes necesidades humanitarias”. Además, menciona un “borrador del panorama de necesidades” que hasta la fecha no se ha hecho público, aun cuando fue presentado por el Coordinador de Socorro en sesión del Consejo de Seguridad el día 10 de abril de 2019, y a cuyas cifras se refirió el Secretario General de la ONU en apenas un mensaje de Twitter, indicando que actualmente un total de 7 millones de personas tienen necesidades humanitarias en Venezuela.
- Conocer el referido panorama de necesidades, cuyas cifras fueron utilizadas para el Reporte de Situación, no solamente es vital para la protección de las personas que en Venezuela están jugándose la vida, la seguridad y el bienestar, de no haber una respuesta oportuna, proporcional y eficaz, sino que puede poner en duda aspectos básicos de independencia, rendición de cuentas y transparencia establecidos en las normas humanitarias y el respeto del derecho de acceso a la información pública en áreas de extrema importancia para el país.
- Finalmente, quienes suscribimos este pronunciamiento no tenemos otro propósito que el de ser parte de la búsqueda de soluciones a la grave situación de emergencia humanitaria que vive el país. La respuesta humanitaria es un derecho y obligación del Estado y de la comunidad internacional, enmarcado en mandatos de protección y apego a principios imperativos y universales del derecho internacional, tal como lo establecen las políticas y normas de los órganos humanitarios de Naciones Unidas; por lo tanto, consideramos que la misma no puede prestarse para ambigüedades ni desviaciones de estos mandatos. En este sentido estaremos en disposición de aportar y apoyar, pero también para hacer saber nuestras posiciones frente a cualquier hecho, acción u omisión que pueda desvirtuar el proceso.
Nota: MiradorSalud consideró pertinente y trascendental difundir este comunicado que publicó «Civilis Derechos Humanos«, una asociación civil sin fines de lucro, creada en 2010 a favor de los derechos humanos, el cual fue firmado por 118 organizaciones y 22 personas. Para acceder a los firmantes de este comunicado pueden ir al enlace de la organización Civilis Derechos Humanos.
En calidad de editora de MiradorSalud, quisiera resaltar que la situación venezolana, según Transparencia Venezuela, no se circunscribe a una crisis humanitaria que son aquellas de corta duración causadas por catástrofes naturales o guerras. Más bien, la crisis en Venezuela es una emergencia política compleja causada por el ser humano, la cual es más prolongada en el tiempo, tiene un eje medular político y afecta todos los ámbitos de la vida humana, como señalamos en el artículo “Venezuela: un peligro para el continente y el mundo” de MiradorSalud. Cepaz la define como “emergencia humanitaria compleja”, tal como fue nombrada en el comunicado, y otros como “emergencia humana”. Es un recordatorio, dada la importancia de los conceptos y definiciones a la hora de describir los hechos, ya que la mayoría se refiere a crisis humanitaria venezolana. Una vez escribí: “Venezuela es un país triste, desolado y sepultado bajo un paisaje de arena donde no crece nada.” Irene Pérez Schael