¿Es posible una vacuna multiviral?
Científicos de la Universidad de Southampton en Inglaterra recién publicaron un artículo en Science Immunology sobre los fundamentos para construir una vacuna contra varios virus simultáneamente. Ellos basaron su investigación en proteínas antigénicas, que estuvieran conservadas o comunes a varios virus y que al ser reconocidas originen una respuesta protectora. Ellos encontraron que las células asesinas (células NK) podían reconocer a diferentes virus a través de un receptor común llamado KIR2DS2. Este receptor al ser reconocido es capaz de mostrar afinidad por la parte conservada de la proteína no estructural NS3 helicase, hecho que facilita que las células asesinas puedan cumplir su función defensora. Es decir que la NS3 helicase podría ser la clave para desbloquear la defensa viral. La NS3 alberga actividades enzimáticas (helicase) que le confieren una multiplicidad funcional, algunas de las cuales son esenciales en la replicación celular; pero, además, ella es uno de los principales blancos inmunológicos durante la infección. Muchos virus como el de la hepatitis C, Zika, dengue o fiebre amarilla contienen la misma región conservada de la NS3 helicase, la cual es reconocida por el mismo receptor KIR2DS2. Los investigadores analizaron el ADN de más de 300 muestras de personas infectadas por hepatitis C y demostraron que el receptor KIR2DS2 está asociado a la eliminación del virus así como que la respuesta inmune asociada a la NS3 helicase prevenía la multiplicación viral. Estos resultados prometedores deben ser todavía evaluados en estudios en animales y en ensayos clínicos. Ahora, los científicos se orientan a demostrar si estas células asesinas (NK) con el receptor KIR2DS2 son protectoras en infecciones con el virus del dengue.
Vacuna de liberación prolongada: ¿multidosis?
Una vacuna que sea de liberación prolongada, contenida en microcápsulas que liberen la dosis inicial y los refuerzos en momentos específicos podría ser una posibilidad. Esto se puede lograr mediante un método de fabricación tridimensional (3-D), inventado por investigadores de MIT, donde se genera un nuevo tipo de micropartícula portadora de la vacuna o de fármacos, fabricada con un polímero biocompatible, diseñado para que se degrade en el tiempo y libere la vacuna en la cantidad adecuada y el momento preciso. Una ventaja de este proceso es que la lenta liberación del compuesto mejora su disponibilidad en el organismo, reduce los efectos secundarios y las dosis son constantes. Las micropartículas inyectables son huecas y se llenan con la vacuna o el fármaco. El tiempo de liberación oscila entre unos días y dos meses.
La técnica desarrollada consiste en la fabricación de microestructuras de alta resolución para crear microdispositivos de geometrías muy complejas que utilizan una variedad de materiales como los copolímeros de ácido láctico y glicólico, el polímero biodegradable más aplicado en humanos. El prototipo fue utilizado con la vacuna trivalente de polio (IPV) inyectada, unas de las vacunas mayormente afectada por los cambios en la temperatura, con muy buenos resultados. Este método podría constituirse en una excelente manera para aplicar vacunas y fármacos al ser encapsulados dentro de un material protector que se degrade lentamente. Su utilidad oscila desde la biomedicina hasta la microelectrónica.
Nuevos hallazgos para una vacuna antimalárica
Investigadores del Walter and Eliza Hall Institute of Medical Research y de la Universidad de Melbourne en Australia en conjunto con científicos de la Universidad de Alberta en Canadá han demostrado que los carbohidratos ubicados en la superficie de los parásitos (Plasmodium) que causan la malaria juegan un papel importante en su capacidad para infectar tanto los mosquitos como a los humanos mediante la glicosilación. Hecho que representa un gran avance en el proceso infeccioso del parásito y su complejo ciclo de vida.
Para entender mejor este proceso, les recuerdo que la hembra Anopheles al estar infectada es portadora de los esporozoítos del Plasmodium en sus glándulas salivales y cuando pica a la persona los esporozoítos pasan a la sangre a través de su saliva, y luego migran al hígado en donde invaden las células hepáticas y se multiplican para continuar con su ciclo de vida hasta llegar a la producción de los merozoítos que provocan la ruptura de los eritrocitos y la enfermedad.
En la superficie del esporozoíto se encuentran las proteínas inmunogénicas CPS y TRAP que han sido blanco para el desarrollo de vacunas. Recientemente, se descubrió que estos antígenos del P. falciparum eran sujetos a glicosilación que consiste en la adición de carbohidratos a una proteína cambiándole su función.
Siguiendo esta línea de trabajo, los científicos australianos y canadienses identificaron la enzima responsable de O-glicosilación, llamada O-fucosiltransferasa (POFUT2), cuya pérdida modifica la propagación del parásito en su ciclo de vida. Los parásitos que tienen deficiencia en esta proteína conservada tienen atenuada la colonización intestinal del mosquito y por otro lado, los esporozoitos aunque maduros en las glándulas salivales del mosquito tienen alterada su motilidad, recorrido y capacidad de invadir el hepatocito en el hígado; hecho que afecta el control de calidad de las proteínas del parásito dependientes de la glicosilación. Al impedir este proceso se anula la estabilización de las proteínas y se desarticula el tráfico de las mismas afectando tanto la transmisión a los mosquitos como la infectividad de los esporozoitos. Es decir, el proceso de glicosilación es una ventaja indispensable para la supervivencia y transmisión de los parásitos que causan la malaria ya que la proteína O-fucosiltransferasa (POFUT2) en el parásito cumple un paso importante y necesario en la transmisión de la malaria o paludismo.
Este descubrimiento podría contribuir con el mejoramiento de la única vacuna aprobada (RTS,S/A01) contra el Plasmodium falciparum, desarrollada por GlaxoSmithKline (GSK), cuyo basamento reside en los dos antígenos de superficie (CSP y TRAP) esenciales en la infección. La incorporación de estos glucanos a la vacuna podría mejorarla sustancialmente.
Irene Pérez Schael
Nota: Imágenes tomadas de las websites: Salud pública y algo más, Wikipedia.org y Sertox.
2 Comentarios
Luis Fidxel Avendaño
Muchas gracias por la información que da una visión optimista del problema, para contrarrestar los embates de los grupos anti-vacunas que nos hacen perder tiempo y energías en neutralizarlos.
¿Sería posible tener algunas referencias bibliográficas de estas buenas noticias?
Gracias por vuestro esfuerzo
Dr. Luis Fidel Avendaño. Chile
Mirador Salud
Hola Luis, gracias por tu comentario. En los enlaces (links) del artículo están las referencias y las veras al pulsarlas.
Agradecida y cariños
Irene