Al muy barinés Grupo Santo Domingo. Continuamos con el tema de los objetivos científicos para una dieta saludable a partir de un sistema de producción sostenible de alimentos que opere dentro de los límites planetarios, generados por la Comisión EAT-Lancet de Alimentos, Planeta, Salud.
En el artículo anterior hablamos de la salud de las personas. Ahora se tocarán los aspectos que tienen que ver con la “salud” del planeta.
Debido a que la producción de alimentos causa importantes riesgos ambientales a nivel mundial, la producción sostenible de alimentos debe manejarse dentro del espacio operativo seguro para los sistemas alimentarios en todas las escalas de la Tierra.
Por lo tanto, la producción sostenible de alimentos para aproximadamente 10 mil millones de personas no debe usar tierra adicional, debe salvaguardar la biodiversidad existente, reducir el consumo de agua y administrar el agua de manera responsable, reducir sustancialmente la contaminación de nitrógeno y fósforo, producir cero emisiones de dióxido de carbono y no causar un aumento adicional en el metano y emisiones de óxido nitroso.
¿Es esto irrealizable? Los autores enuncian que la humanidad nunca se propuso cambiar el sistema alimentario mundial en la escala prevista en esta Comunicación y que será necesaria una colaboración y un compromiso mundial sin precedentes.
Para ello proponen varias estrategias posibles:
- Buscar el compromiso internacional y nacional para cambiar hacia dietas saludables: aumentar el consumo de alimentos de origen vegetal y reducir sustancialmente el consumo de alimentos de origen animal. Este cambio reducirá los efectos ambientales y mejorará los resultados de salud. Este compromiso concertado se puede lograr invirtiendo en información en salud pública y educación para la sostenibilidad, y mejorando la coordinación entre los departamentos/ministerios de salud y medio ambiente.
- Reorientar las prioridades agrícolas de producir grandes cantidades de alimentos a producir alimentos saludables. La producción debe centrarse en una amplia gama de alimentos nutritivos de los sistemas de producción de alimentos que mejoran la biodiversidad, en lugar de aumentar el volumen de unos pocos cultivos, la mayoría de los cuales se utilizan para la producción animal.
- Intensificar de forma sostenible la producción de alimentos para aumentar la producción de alta calidad. El sistema alimentario global actual es insostenible y requiere una revolución agrícola que se base en la intensificación sostenible e impulsada por la sostenibilidad y la innovación del sistema. Este cambio implicaría reducir las brechas de rendimiento en las tierras de cultivo, las mejoras radicales en la eficiencia del uso de fertilizantes y agua, reciclar el fósforo, redistribuir el uso global de nitrógeno y fósforo, implementar opciones de mitigación del clima, incluidos los cambios en el manejo de cultivos y piensos, y mejorar la biodiversidad dentro de la agricultura.
- Gobernanza fuerte y coordinada de la tierra y los océanos, que incluya la implementación de una política de expansión cero de nuevas tierras agrícolas en ecosistemas naturales y bosques ricos en especies, políticas de gestión destinadas a restaurar y forestar tierras degradadas, establecer mecanismos de gobernanza internacional del uso de la tierra y adoptar una estrategia de Half Earth (*) para Conservación de la biodiversidad para salvaguardar la resiliencia y la productividad en la producción de alimentos. Los océanos del mundo deben gestionarse eficazmente para garantizar que las pesquerías no afecten negativamente a los ecosistemas, las poblaciones de peces se utilicen de manera responsable y la producción acuícola mundial se expanda de forma sostenible dado su efecto y vinculación con los ecosistemas terrestres y oceánicos.(*) Conservar la mitad de las tierras y mares de la Tierra para salvaguardar la mayor parte de la biodiversidad, incluidos nosotros mismos, para revertir la crisis de extinción de especies, y garantizar la salud a largo plazo del planeta.
- Al menos reducir a la mitad las pérdidas y el desperdicio de alimentos, en línea con los objetivos globales de desarrollo sostenible (ODS). La reducción sustancial de la cantidad de alimentos perdidos y desperdiciados en la cadena de suministro de alimentos, desde la producción hasta el consumo, es esencial para que el sistema alimentario mundial se mantenga dentro de su espacio operativo seguro. Las soluciones tecnológicas deberán aplicarse a lo largo de la cadena de suministro de alimentos e implementar políticas públicas para lograr una reducción del 50% en la pérdida y el desperdicio de alimentos.
Los objetivos científicos para las dietas saludables a partir de sistemas alimentarios sostenibles están entrelazados con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. El logro de estos objetivos dependerá de políticas públicas comprometidas con las asociaciones y acciones mundiales los garanticen.
¿Cómo vemos a Venezuela dentro de estos escenarios?
Lamentablemente, no vemos a Venezuela en una ruta posible para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y mucho menos de los objetivos científicos para las dietas saludables a partir de sistemas alimentarios sostenibles, algo de por sí bastante complejo.
Bastaría con dar una mirada rápida a la reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos, un tema que MiradorSalud ha desarrollado varias veces. Esto sin entrar en la dieta de supervivencia de nuestra población que merece una discusión aparte, por cierto, demoledora.
Recordemos el ODS 12: Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles, y particularmente la Meta 3: Para 2030, reducir a la mitad el desperdicio mundial de alimentos per capita en la venta al por menor y a nivel de los consumidores y reducir las pérdidas de alimentos en las cadenas de producción y distribución, incluidas las pérdidas posteriores a las cosechas.
¿Vemos compromiso de Venezuela? NO.
- Venezuela no participa en el Diálogo Regional sobre Reducción de Pérdidas y Desperdicios (PDA) de Alimentos en América Latina y Caribe de FAO.
- No hay estimaciones de PDA a lo largo de la cadena de producción de alimentos.
- Como en otras áreas: Sin cifras oficiales.
Lamentablemente, creemos que en Venezuela estamos fuera de los límites planetarios.
PÉRDIDAS Y DESPERDICIOS DE ALIMENTOS EN VENEZUELA
María Soledad Tapia
Este artículo terminó de escribirse antes del segundo gran apagón nacional del 25 de marzo de 2019.
Ya empiezan a manejase cifras de las pérdidas por parte de los productores y ONGs. Las recogeremos.