En la primera semana de Noviembre, el Dr. Francisco Armada fue nombrado Ministro de Salud por segunda vez. Muchas personas se han alegrado con este cambio ya que es un profesional preparado, egresado de la Escuela de Medicina de la Universidad Central de Venezuela, con doctorado de la Universidad de John Hopkins de los Estados Unidos y que viene de ejercer un cargo en el Centro de Salud y Desarrollo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Japón.
Su nombramiento llega después de haber trabajado unos meses como consejero en el Estado Mayor de Salud, lo que posiblemente le ha permitido obtener una visión integral del estado de la salud del país. Según, Carlos Walter, ex-ministro de salud, “Armada cuenta con la formación para encarar los problemas del despacho”.
Armada, en su primera gestión (2004-2007), por ejemplo, en 2006, incorporó al Programa Ampliado de Inmunización (PAI) la vacuna contra el rotavirus, el virus que mata a más niños por diarrea, en el mundo. Este fue un gran logro y representó un hito en Venezuela por su rápido registro e introducción en el PAI, a solamente seis meses de haber sido aprobada por el Instituto Nacional de Higiene “Rafael Rangel” (INHRR). Venezuela fue el tercer país en aplicarla masivamente en Latinoamérica, después de Brasil y Panamá. Esto fue gracias al trabajo en conjunto entre la academia y el ministerio.
Ya existen datos que indican que la vacuna ha tenido un impacto en la reducción de 63,7% en la mortalidad y 14,9% en las hospitalizaciones por diarrea en Venezuela, en los menores de 5 años. Sin embargo, se debe ampliar la vigilancia y aumentar la cobertura de inmunización que fue 76% en 2012, según el boletín de Inmunizaciones en las Américas de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), 2013.
La Dra. Rosabel González, jefe del Centro Nacional de Referencia para el diagnóstico de rotavirus comenta que la prevalencia de rotavirus ha descendido a 13,8% en lo que va de año, en los 7 hospitales de referencia para la vigilancia. Agrega, habría que ampliar con más hospitales esta vigilancia.
En su gestión se institucionalizaron los programas de Barrio Adentro II, III y IV que han decaído con el tiempo porque no fueron integrados al Ministerio, lo que representa una ausencia total de coordinación y un despilfarro de recursos humanos y económicos.
Le dio impulso a la Planta de Vacunas, iniciada en 2001, la cual actualmente ha recibido muchas críticas, como fue expresado en una comunicación a la opinión pública, resultado del Foro “Pasado, Presente y Futuro de la Nueva Planta de Vacunas” en 2012. Internacionalmente, la crítica que se le hace es que el organismo regulador, es decir el INHRR, sea quién gerencie la planta, ya que no es ético que quien produzca las vacunas sea a la vez quien regule sus procesos y productos. Aunque, siempre ha sido el INHRR el organismo productor de vacunas en Venezuela, los tiempos han cambiado, así como las normas y procedimientos internacionales para producir productos biológicos y drogas.
El hospital Cardiológico Infantil ha sido una de sus obras que se ha mantenido.
Pero el Dr. Armada enfrenta muchos retos porque la salud del país necesita una terapia intensiva para su rescate.
Por ejemplo, la infraestructura de los hospitales públicos necesita de una gerencia idónea, dotación de insumos y recursos humanos, mantenimiento de equipos, lo que se traduce en todos los problemas que a diario ocupan las noticias en el país. Cientos de pacientes esperan por cirugías o por procedimientos para afecciones muy graves como las cardíacas o los tratamientos oncológicos. La escasez de medicinas por la falta de divisas para su importación es un problema cotidiano para el ciudadano común y para la prestación de los servicios de salud. En fin es una visión muy dramática.
Al mismo tiempo, es muy importante recuperar la atención pública para descongestionar la medicina privada porque en corto tiempo nos quedaremos sin asistencia médica de ningún tipo, ya que podrían colapsar todos los servicios de prestación de salud.
Pensamos que la comunicación con los distintos gremios y la academia podrían contribuir para salir de este atolladero que embarga nuestra salud.
¿Podrá Armada con este gran desafío?
Irene Pérez Schael
Un Comentario
Consuelo Lopez
La verdad, que el nuevo ministro enfrenta un RETO, muy grande, pero pienso que el cuenta con la formación y la disposición necesaria para salir adelante.
El articulo es excelente.